Hay varios edulcorantes naturales que pueden sustituir al azúcar. Tanto si te has quedado sin azúcar como si sólo quieres dejar de tomar azúcar blanco, aquí tienes algunas alternativas.

Consumir demasiado azúcar no es bueno para la salud, y por eso mucha gente utiliza edulcorantes artificiales para consumir menos calorías, pero ése es sólo uno de los problemas que puede causar.

Como el azúcar blanco es un carbohidrato vacío, dado su nivel de refinamiento, tiene que tomar vitaminas y minerales del cuerpo para ser absorbido, lo que puede llevar a deficiencias en el organismo. En esta lista veremos todas las alternativas al azúcar blanco de mesa.

Aprovecha y cámbiate a un edulcorante que sepa bien y aporte valor nutricional a tu dieta.

Panela

La panela se elabora a partir de la caña de azúcar, no está refinada y contiene mucha melaza, lo que puede darle un color más oscuro que el típico azúcar moreno.

Tiene un índice glucémico inferior al del azúcar blanco. Contiene magnesio, potasio y hierro. Es un alimento que endulza, remineraliza el organismo y tiene vitaminas A, C, B1, B2 y B6.

También tiene unos componentes llamados polifenoles que son tomados por el cuerpo como un excelente antioxidante. Los antioxidantes tienen la capacidad de combatir la acción de los radicales libres y, por lo tanto, ayudan a la regeneración celular. Es un producto relativamente económico.

Azúcar de coco

Este azúcar es ligeramente diferente de los otros sustitutos porque no se produce a partir de la caña de azúcar. Lo que se utiliza para este azúcar es la palma de coco. El azúcar se forma cuando se cocina la palma.

La cantidad de calorías que contiene es la misma que la del azúcar blanco, pero tiene menos fructosa. Al mismo tiempo, su color es el mismo que el del azúcar moreno, por lo que es un gran sustituto.

Además, el azúcar de coco contiene una fibra conocida como inulina, que retrasa la absorción de la glucosa. Sin embargo, debe consumirse como el azúcar blanco normal, ya que sigue conteniendo calorías. Es un producto caro.

Jarabe de agave

Derivado del jugo de un cactus, contiene sobre todo fructosa, el azúcar de la fruta. Tiene un índice glucémico bajo, indicado para mantener un nivel de azúcar constante en la sangre. Es más dulce que el azúcar tradicional, por lo que puede utilizarse en pequeñas cantidades. También contiene muy pocas calorías, también contiene sustancias prebióticas que favorecen la flora intestinal.

Compuesto por un 90% de fructosa, el sirope de agave no tiene ningún sabor especial, por lo que se utiliza fácilmente en productos culinarios o para endulzar de forma natural las bebidas. Es un producto caro.

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