Existen diversos complementos nutricionales que aportan ciertos beneficios para nuestra salud, desde cápsulas o comprimidos, pasando por tabletas, líquidos o sobres entre otros. Dichos complementos nutricionales, principalmente, lo que aportan, son nutrientes a nuestro organismo como vitaminas, minerales, aminoácidos, etc… favoreciendo así nuestra salud y previniendo futuras enfermedades.

En la mayoría de ocasiones, las personas que consumen complementos nutricionales son por falta de nutrientes, ya sea por una alimentación inadecuada o por algún motivo en concreto, como estrés o deporte extremo, aumentando así las necesidades de dichos nutrientes en nuestro organismo.

Dentro de la gran variedad de complementos nutricionales naturales, podemos encontrar cuatro tipos:

1)    Complementos nutricionales: contienen nutrientes específicos como vitaminas, minerales, factores vitamínicos, ácidos grasos, aminoácidos entre otros. Estos nutrientes son básicos en nuestra dieta para que nuestro organismo responda de forma favorable. Es recomendable, en caso de tener una mala alimentación o falta de dichos nutrientes, tomar complementos nutricionales para suplantar la falta de nutrientes.
2)    Complemento herbario: suelen contener extractos de plantas naturales como la aloe vera, diente de león, ginseng, equinacea, valeriana o cúrcuma entre otras. Para aumentar el efecto de los complementos herbarios se deben de realizar varias tomas diarias, como, por ejemplo, al levantarse, dos horas antes o después de comer y antes de acostarse. Repitiendo dichos procesos, se aumentarán considerablemente sus efectos, aportándonos aún una mayor concentración de nutrientes y mejorando nuestra salud.



3)    Complemento fitoquímico: este tipo de complemento nutricional debe de contener grupos de fitoquímicos, como isoflavonas, bioflavonoides o carotenoides. Los complementos fitoquímicos se deben de tomar si no se hace una correcta alimentación la cual debe de incluir nueces, almendras, espinacas, calabaza, zanahoria, cerezas, manzana, brócoli, ajo, cebolla entre otros… aportando así antioxidantes y ayudando a prevenir el cáncer, alzheimer, colesterol, triglicéridos o glucosa en sangre.
4)    Complemento alimenticio: suelen contener concentrados de alimentos como aceites, proteínas del suero de leche, espirulina, canela, brécol, germen de trigo o semillas. Normalmente estos productos tienen una composición muy variada ya que pueden aportar vitaminas, minerales, fibras, aminoácidos, ácidos grasos poliinsaturados, plantas e incluso probióticos., favoreciendo a nuestro organismo aportando efectos nutricionales o fisiológicos. Los complementos alimenticios se suelen consumir en cápsulas o en comprimidos.

Actualmente, algunos de los mejores complementos nutricionales que podemos encontrar en el mercado son los de Drasanvi, que se caracterizan por ayudar a conciliar el sueño, mejorar nuestras defensas en invierno y la circulación de la sangre, proporcionan antioxidantes, vitaminas y minerales, o ayudan en el rendimiento mental o en la salud cardiovascular (dependiendo del complemento); y los de Ana María La Justicia, que ayudan a conservar los músculos, huesos y articulaciones en condiciones normales, obteniendo así un aporte extra de energía (dependiendo del complemento).


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